Quince cosas que deberías saber antes de comer en Corea

Queridos estómagos y estómagas, Corea puede cambiaros la vida. Y también el metabolismo.
Me dispongo a, en pocas líneas, cambiaros la cubertería y reparar vuestras papilas gustativas.

  1. En Corea (casi) todo pica: desde el kimchi hasta las salsas de los deliciosos muslitos de pollo fritos. Muchos adelgazan o, lo que es más común, acabas entrenando la lengua de tal manera que el chili o el tabasco acaban sabiendo a dulce de leche.
  2. En Corea no se usa ni tenedor ni cuchillo. En los restaurantes encontrarás únicamente palillos y cucharas. No busques más y si pides un tenedor obtendrás un NO al más puro estilo coreano.
  3. La comida coreana es barata. La cuenta típica en un restaurante coreano oscila entre los 4000 y los 9000 (2,50€ a 6€).
  4. Un plato coreano nunca viene solo. La prueba, la foto de la derecha. 
  5. Volviendo a la foto, el plato principal son esos grandes cuencos metálicos. El resto de los platitos que se ven, llamados banchan, suelen ser verduritas, pescado frito, soja, tteokbokki y por supuesto kimchi.
  6. Los banchan son gratuitos y puedes pedirlos las veces que quieras sin coste adicional.
  7. La comida callejera, como en la mayoría de Asia, está a la orden del día.
  8. No busques pan, porque no hay. Lo encontrarás en formato pan de molde, pero más dulce que al que estamos acostumbrados en España.
  9. Echarás de menos los muslitos de pollo al estilo KFC. La combinación de pollo + cerveza es una de las cenas típicas entre amigos y pre-festivas. Muchos restaurantes tienen ofertas tipo all-you-can-it con el pollo. Cuesta creer que haya tanto pollo en tan poco territorio.

    Lo sentimos, Minji no va incluída.
  10. Otra comida muy típica cuando hay mucha gente, y posiblemente la más famosa entre los occidentales, es la barbacoa coreana (bulgogi). Es toda una experiencia: cada mesa va equipada con una campana extractora y, en el medio, un fuego sobre el que se asienta una gran sartén donde cocinaremos nosotros mismos la carne. Además de la carne, se sirven los ya citados banchan, cuencos de arroz, lechuga, ajo picado, cebollita y distintas salsas de soja. Todo un manjar por apenas 8-10€ por barba. Un ejemplo gráfico:

                                    
  11. En muchos restaurantes encontrarás máquinas de café gratuitas. A gusto y abuso del consumidor.
  12. Comer es uno de los placeres de los coreanos. Verás restaurantes por todas partes
  13. Un claro signo de la modernidad coreana es que en la gran mayoría de restaurantes podrás pagar con tarjeta, incluso aunque parezca que los dueños tengan pinta de no saber ni lo que es un código PIN.
  14. En Corea no se deja propina. ¡Correrán detrás tuyo para devolvértela!
  15. Por último, y como mención especial, hablaré de lo que me alimentó durante mis periodos de exámenes así como en los amaneceres post-festivos. En Corea hay una fuerte cultura por la comida de microondas y de agua caliente. Las llamadas 'convenience store' como 7Eleven, CVs o GS25 (una suerte de tiendas 24h) tienen todo tipo de tallarines (ra myeon), hamburguesas de microondas, arroz con kimchi/pollo/gambas/pulpo, etc. Creedme cuando os digo que te sacan de un apuro pues en 2 minutos estás comiendo y algunos productos (especialmente los tallarines) ¡están deliciosos!
Pequeña selección de ra myeon